Los elegidos y la industria del cine

Comentaba a primera hora de la mañana uno de los periodistas radiofónicos más influyentes de España el éxito de la serie televisiva The Chosen.


​​Publicado en primicia en la sección opinión del digital El Debate (28/JUN/2023), y posteriormente recogido por La Razón de la Proa (LRP) Recibir el boletín de LRP.​

Comentaba a primera hora de la mañana uno de los periodistas radiofónicos más influyentes de España el éxito de la serie televisiva The Chosen (Los elegidos). Entre sorprendido y desconcertado porque aún existiese un público masivo para este tipo de contenidos, orlaba la noticia con la de que también en España triunfaba Libres, un documental sobre la vida monástica dirigido por Santos Blanco. Apenas unos segundos del programa acaparó esta noticia para inmediatamente dar paso a la información de pactos y vetos propios del día de la marmota.

La fuente de la breve noticia procedía de IMDb, unas siglas que corresponden a Internet Movie Database (en español: Base de datos de películas en Internet). IMDb es una base de datos en línea que en un principio almacenaba información relacionada con películas hasta convertirse en este momento en la base de datos más grande del mundo. Fue lanzada sólo a través de internet en 1990 hasta que en 1998 la adquirió Amazon.com. IMDb es la fuente más popular e influyente del mundo para los contenidos de películas, televisión y otros relacionados.

Precisamente y en pleno inicio de la tercera temporada de The Chosen –de momento sólo doblada en español latino–, IMDb actualizó el ranking de las series de televisión más populares de todos los tiempos a partir de la valoración que hicieron sus propios suscriptores. El resultado fue otorgar el primer puesto a Breaking Bad y el segundo a The Chosen.

La serie está ubicada en la Judea del siglo I y desarrolla de una manera que «engancha» al público la vida Jesús de Nazaret y las diferentes personas que lo conocieron y lo siguieron. Superó en valoración a series bien asentadas como Juego de tronos, The Sopranos, The Office, Better Call Saul, Friends y Peaky Blinders.

La fuente de financiación de los primeros capítulos fue tan antigua como la propia religión cristiana: las donaciones de una comunidad entregada. El promotor fue el joven matrimonio formado por Dallas y Amanda Jenkins, cristianos evangélicos norteamericanos. The Chosen retribuyó a los donantes con acciones de la productora, The Chosen LLC, a través de un proceso de oferta presentado ante la Comisión de Bolsa y Valores de EE.UU. (SEC por sus siglas en inglés). Estos inversores iniciales podrían participar de las ganancias del programa y de otras fuentes de ingresos tales como las ventas de camisetas con el exitoso anagrama de la multiplicación de los panes y los peces a modo de sencilla operación aritmética y libros coescritos por el matrimonio Jenkins.

Tras las recaudaciones iniciales vino el apoyo de la productora Vertical Church Films, vinculada a la iglesia de Chicago conocida como Harvest Bible Chapel, que ya había sacado adelante varias producciones cinematográficas.

Sin embargo, el acontecimiento de The Chosen que conmovió a la industria cinematográfica ocurrió en Midlothian, Texas, cuando dos mil personas vestidas con túnicas y pañuelos participaron de la recreación del Sermón de la Montaña, pagando mil dólares norteamericanos en promedio cada uno para convertirse en extras. Además, cada uno financió su propia indumentaria temática. Las imágenes del rodaje muestran una estrecha comunión entre los actores, el equipo de dirección y el actor principal, Jonathan Roumie, que encarna a un Jesucristo que supera sobradamente la imagen de colega juvenil. Roumie fue criado dentro de la Iglesia Ortodoxa Griega y más tarde junto a su familia se convirtió al catolicismo.

La no muy exitosa aportación de la religión cristiana reciente al séptimo arte –Cristiada posiblemente sea la mayor excepción– cuenta con otra historia de éxito en este caso en España. Aunque no sea tema de tertulias periodísticas, Libres, de Santos Blanco, ha logrado ya más de 85.000 espectadores.

Muy diferente a The Chosen, Libres es un documental sobre la vida monástica. Ha escrito Gonzalo del Prado que entre grandes superproducciones como la décima entrega de Fast & Furious, La sirenita o Transformers: el despertar de las bestias se ha hecho hueco en las salas este pequeño documental sobre monjes y monjas y su vida en clausura aguantando ya nueve semanas en cartelera y camino de los 100.000 espectadores.

Libres es ahora mismo uno de los diez documentales españoles más vistos en los últimos 20 años en nuestra nación. Lucía González Barandiarán es su productora. Lucía fundó hace ya seis años Bosco Films, una empresa volcada en el cine con 'valores'.

No he tenido oportunidad de leer opiniones sobre estas dos producciones a mis críticos cinematográficos de cabecera; Pepe Ramírez Asensio y Fernando Alonso Barahona, pero seguro que no estarían lejos de pensar que la obsesiva batalla cultural contra el cristianismo priva a los medios de comunicación no sólo de abrir un hueco a estos contenidos sino, por qué no, a falta de compartir Fe, por lo menos de participar en la actividad económica que generan.