Indigenismos

El indigenismo actual es un elemento disgregador de toda idea de universalidad, tan propia del ser de España

El actual conflicto de Venezuela nos hace olvidar que la América Hispánica tiene muchos más problemas que la presencia mostrenca de un dictadorzuelo en el poder.

• Y uno de ellos es el auge de los indigenismos.

Quien crea que el fenómeno del nacionalismo disgregador -siempre en búsqueda incesante de un enemigo exterior o interior- es privativo de Europa no ha caído en la cuenta de que también en Hispanoamérica existe hoy, en proporciones alarmantes, bajo el nombre de indigenismo.

• Si, en la clasificación del filósofo Gustavo Bueno, los movimientos nacionalistas en el seno de las naciones europeas defienden ilusorias naciones fraccionarias, los indigenismos americanos descienden aún más y buscan liberar sus supuestas naciones étnicas.

Su enemigo no es otro que la cultura mestiza, la que creó la acción colonizadora de España; para ellos, su raza quedó subyugada y ahora sienten reverdecer la sangre de sus ancestros precolombinos.

• Mal cuadra esta teoría con la presencia -gozosa por mi parte- de inmigrantes hispanos (que no latinos) en nuestras ciudades, que suelen hablar un español más rico y culto que el habitual en nuestra sociedad y que llenan nuestras iglesias para, ahora, evangelizarnos a nosotros, abducidos por el materialismo.

Como todo nacionalismo, el indigenismo se sustenta en medias verdades, que eleva a la condición de dogmas; una de ellas es que sus pueblos están sometidos a la pobreza y a la marginación.

• Si repasamos la historia, veremos que esa situación comenzó cuando se produjo la independencia de aquellos territorios españoles, creándose un camino de Babel -en expresión de Eugenio d´Ors- en lugar de una senda de unidad.
• Los verdaderos triunfadores de la independencia fueron los representantes de la burguesía criolla, de ideología liberal como la europea; entonces comenzó la represión del indígena, hasta aquel momento protegido por las Leyes de Indias.
• Aquí no podemos menos que referirnos al patinazo del papa Francisco en sus primeros viajes a aquellas tierras…

Precisamente en las guerras de independencia, que fueron en principio guerras civiles, los indios lucharon mayoritariamente a favor de los realistas contra quienes, después, serían sus auténticos esquilmadores.

• Luego, la propaganda interesada -la mayor parte de origen exterior- obró la transformación; así, hoy en día, desde Estados Unidos a Tierra de Fuego, se acusa de genocidio a los conquistadores españoles y se apean estatuas de Colón o de Fray Junípero Serra.

Pero la raza cósmica, que diría Vasconcelos, desmiente con su existencia la patraña.

• El indigenismo actual es un elemento disgregador de toda idea de universalidad, tan propia del ser de España; ya dejó dicho Eugenio d´Ors que con ningún nacionalismo es compatible el servicio auténtico a la Hispanidad.
• Hispanidad que es valor y que es Idea constante de España, donde, por desgracia, también proliferan los movimientos disgregadores.

Guillermo Morales