Villancico del Niño Jesús y los niños que sufren
La Nochebuena es la noche en la que todos nacemos.
A Eugenio Nasarre. Navidad de 2023. Publicado en la revista El mentidero de la Villa de Madrid (23/DIC/2023). Ver portada El Mentidero en La Razón de la Proa (LRP). Solicita recibir el boletín semanal de LRP.
Cuando el Dios Niño renace
desde los más altos cielos
-lumbre que el tiempo custodia-
le llegan, bendito eco,
gritos y risas de un Niño:
la memoria de su pueblo.
Nazaret: la humilde casa
de José, el buen carpintero,
donde vivió la alegría
de su infancia como un sueño.
Y la casa de María,
hoy iglesia y valimiento
de tantos buenos cristianos,
y sus tres Papas viajeros.
Allí el Espíritu un día
anunció su nacimiento.
Y el pozo de agua tan clara
que, cuando Él era pequeño,
le daba a beber su Madre
interrumpiendo sus juegos.
Gritos le llegan ahora,
súplicas, llantos, lamentos,
voces de niños que sufren,
reflejos de tiernos miedos
que se expresan en dos lenguas:
en árabe y en hebreo.
La memoria del Dios Niño
revive un tiempo sin tiempo,
cuando jugaba y hablaba
en cantarín arameo.
La guerra no tiene causas,
sólo muerte y desconsuelo.
Mientras los hombres se matan
los niños viven, incrédulos,
una experiencia de sombras,
un cruel desasosiego
que no borrarán los años,
que en ellos serán eternos.
Israel y Palestina
son dos referentes hueros
para la inocencia herida
de unos niños sin consuelo.
Callen las armas sus gritos,
las bombas callen su estrépito,
que el silencio no lo rompa
la muerte trocada en trueno.
Y desde la paz del alma
cesen los enfrentamientos.
Que la Estrella de Belén
ilumine el firmamento.
La Navidad es la Paz
y el Amor entre los pueblos.
El Dios misericordioso
es Padre de todos ellos,
pena la pena de todos,
y su dolor es el nuestro.
Su Reino no tiene límites
e infinito es su desvelo.
El Dios Niño escucha gritos
de niños que están sufriendo
y pide al Dios Padre que haga
que se apaguen sus lamentos.
Nazaret es “brote”, “flor”,
y ha de brotar, contra el miedo,
la Paz celestial, la flor
de Amor y de entendimiento.
Mientras, una estrella nueva,
de milagroso destello,
en Belén da Luz al mundo,
sin tiempo porque es el Tiempo,
y anuncia de un Dios ya hombre
el humilde Nacimiento.
La Nochebuena es la noche
en la que todos nacemos.