EDITORIAL | TROCHA
Juventud con valores
Y esa juventud con valores no debe esconderse a la hora de difundir sus mensajes a una sociedad que es incapaz de la Creencia, de la afirmación, de la Idea.
Publicado en el núm. 250 de la revista Trocha, de septiembre de 2023. Editado por Veteranos OJE - Cataluña. Ver portada de Trocha en La Razón de la Proa. Para recibir el boletín de Trocha
Ya en la Roma clásica, algunos sesudos varones de edades maduras o provectas se quejaban de la juventud, generalizando, de forma injusta, sus dicterios. Desde entonces, sin interrupción y con pocas excepciones honrosas, nunca han cesado estas críticas de una generación a otra… sobre todo por parte de quienes ya no se acuerdan de sus andanzas y correrías de otros tiempos.
Así, en nuestros tiempos, con el agravante de que los medios de difusión y propaganda (que no solamente de información) airean una parte de los jóvenes que, a ser más llamativa, degenerada en ocasiones, glamurosa y, habitualmente, dócil ante las normas del Sistema, despierta más interés y vende más ante los públicos.
Este verano, sin embargo, hemos tenido muestras apabullantes de que existe una juventud con valores, nada proclive a acatar lo que se lleva. En primer lugar, los dos millones y pico que se concentraron en Lisboa para asistir a las jornadas de la JMJ, para rezar, cantar y mostrar alegría y discrepancia frente a un mundo laicista y absurdo; de hecho, muchas ciudades de Portugal se llenaron de miles de banderas de todas las naciones del mundo ⎼por supuesto, muchas de España⎼ enarboladas por las representaciones juveniles. Curiosamente, el acontecimiento fue escasamente publicitado por los medios, los mismos que sí resaltan al bobo influencer de éxito viral, al delincuente, al drogadicto como muestra de juventud del siglo XXI,
Y, ya en un ámbito más doméstico, nuestra propia O.J.E. llevó a cabo, en tierras murcianas, su Campaña Nacional de Actividades, que, también con escasas excepciones honrosas de la prensa local, tampoco despertó la atención de televisiones y periódicos, más pendientes de que si, por ejemplo, una cantante se reivindicaba haciendo ostentación de sus gracias naturales en un concierto.
Existe, sin lugar a dudas, una juventud con valores: juventud que cree en Dios y que lo pone por delante de todas sus aspiraciones (como en el primer punto de nuestra Promesa); que afirma su patria, con ostentación nada vergonzante de sus símbolos nacionales; que practica el servicio, sin formar parte de ninguna ONG profesionalizada; que destaca la libertad responsable y acepta la auctoritas de sus mayores y no las imposiciones del Poder Establecido; que no reniega de la historia y de sus referentes valiosos…, y que cree en sí misma y desea transformar un mundo lleno de injusticias.
Y esa juventud con valores no debe esconderse a la hora de difundir sus mensajes a una sociedad que es incapaz de la Creencia, de la afirmación, de la Idea.